Ayer, día 18 de octubre, se debatieron tres iniciativas parlamentarias relacionadas con la política de personal de la Guardia Civil.
La Proposición No de Ley presentada por el grupo Unidos-Podemos, que solicitaba el derecho de sindicación de los guardias civiles, no salió aprobada por el voto en contra de los Grupos PP y PSOE y la abstención del Grupo Ciudadanos.
La propuesta presentada por PSOE, que recogía cuestiones como la no aplicación del Código Penal Militar en funciones policiales, que se paralice el uso de la potestad disciplinaria contra dirigentes de las asociaciones y tercero, mejorar las condiciones profesionales de los guardias civiles, tampoco vio la luz, por la oposición de PP, también de Unidos-Podemos, alegando estos últimos que esa era irrelevante un “brindis al sol”, en el sentido de que no iba a mejorar la situación actual de déficit de derechos para los guardias civiles.
AUGC ya se ha posicionado a este respecto en el sentido de que en efecto, dado que el marco normativo que señala la Ley Orgánica de derechos y deberes de los miembros de la Guardia Civil es insuficiente, y por tanto, mejorable, en cuanto a que no está suponiendo una mejora real en las condiciones sociales, económicas y profesionales de los guardias civiles, debe afrontarse la necesidad de regular el derecho de sindicación, como instrumento más efectivo de acceder a los avances conseguidos por el resto de servidores públicos.
Por lo anterior, las conclusiones iniciales que podemos avanzar en cuanto a la actividad parlamentaria que hemos referido, son en primer lugar, que vemos como positivo que cambiar la situación de los guardias civiles comienza a ser importante en esta nueva etapa política.
En segundo lugar, y no ya de forma tan satisfactoria, comprobamos como los diferentes grupos parlamentarios no están siendo capaces de llegar a acuerdos que en cualquier caso, serían beneficiosos para los integrantes de este cuerpo de seguridad, llegándose incluso a utilizar las siglas de AUGC, en el sentido de que se esgrimen pactos realizados con los representantes de esta asociación profesional para sostener las diferentes posturas, sin caer en la cuenta, de que con ello se puede estar comprometiendo la neutralidad política ordenada legalmente a los guardias civiles.
Tanto en cuanto AUGC, lo que viene realizando, como organización representativa de la mayoría del colectivo, es mantener una vía de dialogo con los diferentes responsables políticos para hacerles llegar las inquietudes de los y las guardias civiles.
En suma, valoramos cualquier iniciativa a favor de la Guardia Civil, y sus integrantes, condenamos las posturas tibias e indiferentes, e invitamos al poder legislativo encarnado en los actuales grupos parlamentarios a un esfuerzo de consenso que redunde en beneficios reales para los trabajadores y trabajadoras de la Institución, dada la importancia que conlleva para miles de servidores públicos y sus familias.
