AUGC quiere reiterar la necesidad de que en la Guardia Civil se establezcan controles y reconocimientos médicos con periodicidad a los trabajadores del Cuerpo. El trágico suceso ocurrido esta semana en la A3, donde un guardia civil, que se encontraba de baja médica, presuntamente ha disparado con su arma reglamentaria a otro conductor con el que tuvo un incidente de tráfico, pone de manifiesto una vez más la importancia de este tipo de controles entre los agentes de la Guardia Civil.
Otra de las evidencias que pone de manifiesto la necesidad de controles médicos entre los trabajadores de la Guardia Civil es la altísima tasa de suicidios que se registran en el Cuerpo, uno cada 26 días. El elevado índice de estrés al que están sometidos los agentes, por su profesión, o la falta de normas para planificar la vida laboral y familiar, como es la ausencia de turnos de trabajo, hace imprescindible la adecuación de un protocolo eficaz que garantice su salud psicológica.
Al mismo tiempo, AUGC vuelve a pedir a la Dirección General la instalación de armeros en las dependencias del Cuerpo para que los agentes puedan depositar sus armas al finalizar el servicio.
No resulta de recibo que un guardia civil no tenga opción para elegir y tenga que hacerse cargo obligatoriamente de su arma fuera de su horario laboral, con el consiguiente riesgo que ello supone tanto para él como para su entorno familiar y social.
En este sentido, cabe recordar la exigencia de AUGC de que de una vez por todas se apliquen los turnos de trabajo a los guardias civiles. La falta de una jornada laboral digna viene además agravada por esta circunstancia de la falta de armeros. Un guardia civil, como cualquier otro trabajador, es un ciudadano con derecho a su correspondiente descanso, algo difícilmente compatible con el hecho de desconocer a corto plazo cuál será su jornada laboral y con la circunstancia de tener que custodiar en su vida privada el arma reglamentaria con la que realiza su trabajo.
Una situación que, además, se ve agravada por la inexistencia de los citados controles y reconocimientos psicofísicos que AUGC reclama.
