El pasado día 8 de junio de 2018, tuvo lugar la reunión de la Comisión Permanente de Normativa del Consejo de la Guardia Civil.
Durante la misma fueron tratados los borradores de normas que os comentamos más abajo, paso previo a que las mismas sean llevadas a informe en el próximo Pleno del Consejo, a celebrar el día 27 de junio.
Real Decreto por el que se modifica el Reglamento de la Real y Militar Orden de San Fernando, aprobado por el Real Decreto 899/2001, de 27 de julio.
Real Decreto, por el que se aprueba el Reglamento de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo.
Ambas son normas provenientes del Ministerio de Defensa, y que por afectar a guardias civiles deben pasar el trámite de ser informadas en el Consejo de la Guardia Civil. Nos quejamos de que para las mismas no se haya celebrado ningún grupo de trabajo previo, donde poder efectuar alegaciones y tener mayor conocimiento de las mismas. Algo que viene siendo más habitual de lo normal. Por dicho motivo, nuestro voto fue contrario a las mismas.
Real Decreto sobre la determinación de la aptitud psicofísica del personal de la Guardia Civil.
Esta es una norma que pasa por segunda vez por el Consejo. Ello debido a que la misma fue devuelto en el trámite orgánico, debido a las “recomendaciones” que distintos ministerios pusieron de relieve. Por esto mismo entendemos que no debería haber tanta prisa y que la norma se merece ser estudiada con más detenimiento en otros grupos de trabajo.
Achacamos como negativo que esta norma no orienta las evaluaciones como forma de velar por la salud de los guardias civiles. Tampoco se recogen consideraciones de carácter rehabilitador.
Por ello hemos solicitado su retirada del Pleno.
Orden General por la que se establece un protocolo de actuación para la adopción preventiva de medidas específicas ante situaciones de naturaleza psiquiátrica, psicológica o ante conductas anómalas que afecten a los guardias civiles.
Orden general que, según la DGGC, intenta refundir las distintas instrucciones y protocolos de actuación vigentes en la actualidad a adoptar cuando estamos ante “conductas anómalas” del personal de la Guardia Civil.
Dicho protocolo establece la posible retirada de la TIP.
Orden General sobre normas de policía personal, aspecto físico y trato con la ciudadanía.
Esta es una de las normas que más polémica ha suscitado, tanto en su desarrollo durante los grupos de trabajo previos, como en la misma reunión de la Comisión de Normativa.
Como no podía ser menos, la causa principal es la regulación de los tatuajes.
La práctica totalidad de asociaciones solicitamos que la norma fuera retirada del orden del día del Pleno de junio, para intentar abordar la misma desde un consenso más amplio.
Entendemos que la Orden General contempla actuaciones que deberían estar amparadas por una norma de rango superior, lo que conllevaría la obligatoriedad de que la misma fuera informada por el Consejo de Estado, y que pasara por la Secretaria General Técnica del Ministerio del Interior, por si la misma incidiera en derechos fundamentales.
Orden Comunicada sobre régimen de servicio e incentivos para servicios especiales en los buques de altura de la Guardia Civil.
Estamos ante un nuevo ataque a la vigente Orden General de jornada laboral. Por la vía de una orden comunicada se quiere modificar el régimen de trabajo de todo un colectivo, el servicio marítimo, por supuesto sin dar ni una mínima explicación.
Parece que para la DGGC, y especialmente para la jefatura del Servicio Marítimo, la conciliación de la vida familiar y laboral es algo de lo que se puede prescindir cuando y como se crea conveniente.
La Guardia Civil tiene un problema de plantilla, y pretende solucionarlo a base de sacrificar a la escala de cabos y guardias y a la escala de suboficiales. Esto ya lo estamos viendo en la Agrupación de Tráfico, donde se alarga la jornada de forma ilógica a 40 horas semanales. ¿Cuál será el siguiente colectivo o especialidad?
Desde hemos planteado que existen maneras menos lesivas de buscar una mayor eficiencia en el servicio y combinarlo a su vez, con una adecuada conciliación de la vida familiar y laboral. De este modo, se ha propuesto que se retribuyan los DAS, a aquellos guardias civiles que voluntariamente renuncien a los mismos, dando lugar ello a que se aumente las horas de servicio de forma real, pero prefieren “castigar” a toda la especialidad.
La decepcionante respuesta de los representantes de la Dirección General en la Comisión de Normativa ha sido que “el que no esté contento que se vaya, que tampoco tienen por qué estar toda la vida en el servicio marítimo”. Así las cosas, y si estos mandos reaccionarios continúan en su actitud de seguir adelante con este borrador de orden, AUGC la impugnará en los tribunales de justicia, por ser lesiva a los intereses de los guardias civiles.
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