Ahora, la Guardia Civil parece decidida a dar los primeros pasos para que este reconocimiento que debería haberse producido en el año 2007, desde el primer momento que se aprobó la Ley Orgánica reguladora de derechos y deberes.
Con la aprobación de esta Ley Orgánica 11/2007, se reguló el ejercicio del derecho de asociación con fines profesionales. Un derecho que se ejerce hoy con normalidad, favoreciendo la mejora de las condiciones profesionales, económicas y sociales de los guardias civiles.
Así, la regulación del asociacionismo profesional se convertía en una realidad y se abrieron nuevos cauces de participación y expresión de los miembros de la Guardia Civil. Cauces que hoy se encuentran consolidados, ejerciendo una interlocución entre los representantes de los guardias civiles y la institución.
Seguiremos trabajando para que el reconocimiento sea pleno, y así uno de los socios fundadores de AUGC, el sargento José Morata, junto al Cabo1º Manuel Rosa Recuerda , el GuardiaCivil José Carlos Piñeiro González y el guardia civil, ya fallecido, Manuel Linde Falero vean reconocido públicamente el sacrificio personal y profesional de miembros de la Guardia Civil que impulsaron los movimientos iniciales que culminaron con el establecimiento de un marco normativo que dio normalidad al ejercicio del derecho fundamental de asociación en su vertiente profesional.
Para ello resulta obligado agradecer en público a los guardias civiles que, desde finales de los años 70 y hasta mediados de los 90, propiciaron que hoy el ejercicio de este derecho sea una realidad evidente que ha demostrado ser útil para el funcionamiento de la Institución.
