AUGC recuerda que las asociaciones profesionales, como recoge la Ley Orgánica 11/2007, tienen como fin la acción representativa en defensa de los derechos e intereses de los guardias civiles, fin que esta Organización y sus cargos llevan a cabo hasta sus últimas consecuencias y a pesar de las amenazas de expedientes disciplinarios.
El máximo responsable de la Comandancia de Melilla no deja de sorprender a los guardias civiles, su ignorancia de las leyes ha quedado patente en la contestación que ha dado a AUGC sobre su petición de protocolo de actuación con los inmigrantes ilegales. Según el teniente Coronel considera que AUGC no tiene capacidad para solicitar dicho protocolo. Y así se lo ha hecho saber a través de una resolución enviada al secretario general de la Organización en la Ciudad Autónoma. Para el máximo responsable de la comandancia, AUGC se ha ‘“extralimitado” en sus derechos representativos’ al pedir este protocolo, ignorando, después de seis años, que este derecho le viene dado y reconocido por la Ley Orgánica 11/2007 de Derechos y Deberes de los miembros de la Guardia Civil. Una Ley que AUGC, en su escrito de recurso presentado esta mañana, se encargado de refrescar a este responsable de la Institución, porque como muy bien se recoge en su artículo 36 la finalidad “principal” de las Asociaciones Profesionales “(que no la única) es la satisfacción de los intereses sociales, económicos y profesionales de sus asociados”.
A diferencia de los responsables de la Guardia Civil en Melilla, AUGC solo ha hecho su trabajo al tratar de “buscar la seguridad jurídica de los agentes en sus actuaciones diarias y que se respete y garantice otro derecho de los Guardias Civiles que resulta ser el de la Prevención de Riesgos Laborales y la salud”. Porque es lo que la Organización ha pretendido con la petición de un “protocolo de actuación con explicaciones pormenorizadas sobre la forma de conducirse en el servicio de seguridad del perímetro fronterizo y costa”, especialmente en las “actuaciones con inmigrantes y con autores de presuntos hechos delictivos”. Probablemente AUGC no hubiera tenido que solicitar ningún protocolo si, cuando se registraron los primeros actos violentos en el perímetro fronterizo, la Comandancia hubiera hecho su trabajo dando unas directrices claras a los guardias civiles para actuar en esto casos, protegiendo su salud y las posibles acciones legales que pudieran derivarse de sus actuaciones.
AUGC seguirá velando por los derechos y seguridad laboral de los trabajadores de la Guardia Civil, y lo hará porque para ello ha sido la Organización más votada en las últimas elecciones al Consejo con el 70% de los votos de los trabajadores de esta Institución, porque lo recogen sus propios estatutos presentados en el Registro de Asociaciones de la Dirección General y porque lo recoge la Ley Orgánica 11/2007 y su LPR.
