La iniciativa A Contramarcha Salva Vidas (ACM SV), de la que forma parte el guardia civil Jesús Rodríguez, acaba de lanzar la campaña Verano Seguro ACM, una iniciativa de profesionales en seguridad infantil en el automóvil, que se desarrollará coincidiendo con la “operación salida” de verano concretamente el día 29 de junio.
Por ello, el día 29, con el hashtag #VeranoSeguroACM, se está difundiendo en las redes sociales un cartel y el enlace a nuestra web donde se verán ocho noticias y testimonios reales de accidentes de tráfico en los que al menos uno de los ocupantes, menores de edad, salieron ilesos gracias a que viajaban en sillas instaladas de espaldas a la marcha. De este modo, se quiere demostrar con hechos que la única manera segura de viajar es a contramarcha, desmontando así aquellos mitos y miedos normales que puedan surgir a quienes nunca han oído hablar de esta forma de llevar a los más pequeños en el coche.
La meta es conseguir que todos los niños menores de 4 años (como mínimo), viajen siempre en el coche en sillas a contramarcha, concienciando a los padres de los graves peligros a los que enfrentan a sus hijos por no hacerlo y asesorando profesionalmente acerca de las soluciones más adecuadas a las necesidades de cada familia desde A Contramarcha Salva Vidas en Facebook.
Jesús Ródríguez es un guardia civil afiliado a AUGC destinado desde hace 15 años en los equipos de Atestados de Tráfico en Las Palmas de Gran Canaria. En su trabajo, reconoce, ha visto de todo, y ello le lleva a mostrar una especialidad sensibilidad respecto a las medidas de seguridad que se deben adoptar en el interior de los vehículos. Un celo que se vio acrecentado cuando su esposa se quedó embarazada y la pareja comenzó a interesarse por los sistemas de retención para los más pequeños.
“Comenzamos a recorrer las tiendas solicitando información sobre las sillas para niños menores de cuatro años, o de 18 kilos –recuerda Jesús-. Yo ya había leído que hasta esa edad lo idóneo es que los niños viajen a contramarcha, porque hasta ese momento no han desarrollado todavía los músculos del cuello y el torso necesarios para resistir un impacto. Para mi sorpresa, en los comercios nos dijeron que ese tipo de sillas no existían. Tras mi insistencia ya me reconocían que en realidad no los vendían, ya que los niños se agobiaban o mareaban viajando a contramarcha”.
Como consecuencia de aquella frustrante constatación, Jesús comenzó una intensa actividad en las redes sociales para denunciar esta falta de formación e información acerca de un asunto tan crucial. “Un día me ofrecieron dar una charla sobre seguridad vial y sistemas de retención infantil en un comercio, y a ésta le siguieron otras en centros de salud, asociaciones, etcétera”, explica.
Como líneas básicas de sus exposiciones, Jesús recuerda, además de la necesidad de que los niños menores de cuatro años viajen a contramarcha, “que no todo lo homologado tiene que ser seguro, y que incluso una buena silla puede resultar inútil si no está bien montada”. Por eso, insiste en que los padres soliciten del comercio el montaje.
La campaña fue creciendo, llevándole a impartir sus ponencias fuera de las islas, en lugares como Barcelona, Cádiz o Málaga. Finalmente, su trabajo le ha hecho merecedor del Premio Ciudadano Ponle Freno, una plataforma ciudadana que trabaja por la seguridad víal, impulsada por Atresmedia y que cuenta también con la participación de la compañía de seguros AXA. Jesús recibió el galardón el 7 de abril de 2016 en el Senado.
Desde entonces, admite que apenas ha parado: “Me han entrevistado en revistas especializadas y radios, se ha multiplicado al demanda de charlas, han contactado conmigo las propias empresas fabricantes de sillas…”. .
Al margen de las charlas, Jesús ha puesto además en marcha la web seguridadvialenfamilia.com, donde difunde sus consejos y facilita su contacto.
