La Dirección General quiere arrebatar los pocos derechos de los que ahora disponen los guardias civiles

La Dirección General quiere arrebatar los pocos derechos de los que ahora disponen los guardias civiles

por Ildefonso Garcia Ruiz

Imagen de la Marea de Tricornios, la manifestación convocada por AUGC que en noviembre de 2015 sacó a la calle a más de 12.000 guardias civiles y familiares.
Imagen de la Marea de Tricornios, la manifestación convocada por AUGC que en noviembre de 2015 sacó a la calle a más de 12.000 guardias civiles y familiares.

AUGC no va consentir que, utilizando cualquier pretexto, la cúpula del Cuerpo pretenda volver a arrojar a los guardias civiles a las pésimas condiciones laborales que padecíamos el siglo pasado.

Esto es lo que en la práctica está ocurriendo, cuando desde el Mando Operativo de Servicios se están impartiendo instrucciones para aumentar las horas de servicio de muchos integrantes del Cuerpo. Y lo que es peor, con intención de generalizarlas a todos los guardias civiles.

A los hechos nos remitimos, porque de entrada, se ha “decretado”, según oficio de fecha 28 de junio, que se ampliaba la jornada laboral a 40 horas semanales, para los compañeros que prestan servicio como motoristas y atestados, en funciones operativas de la Agrupación de Tráfico, por un intervalo de tiempo comprendido entre el 4 de julio y el 2 de septiembre. Pero este agravio que se cometía en los meses de verano, no parece ser sino el principio de un taimado plan ideado por la cúpula de la Guardia Civil. Y es que con fecha 15 de septiembre se creaba una nueva instrucción para “retorcer” de manera reiterada la Orden General sobre prestación de servicio, jornada y horario en detrimento de los empleos de Cabos y Guardias, anunciando la continuación de jornadas de 40 horas semanales desde el 2 de octubre hasta el 31 de diciembre, en esta ocasión como castigo para 18 Subsectores de la Agrupación de Tráfico, con la excusa de que en sus demarcaciones han aumentado los accidentes en carretera.

Y ahora constatamos cómo el plan para atropellar los derechos de los guardias civiles continúa su curso, y ni cortos ni perezosos, se han dado instrucciones para que los diferentes mandos, hagan lo propio, en aquellas comandancias de la Guardia Civil donde suba la estadística de delitos.

Y es que hemos tenido constancia de que estas órdenes están siendo impartidas de manera verbal en la Comandancia de Granada - nos tememos que pronto le seguirán otros unidades territoriales - para aumentar la jornada laboral de los guardias civiles que prestan servicios operativos hasta las 40 horas semanales, recibiendo una paupérrima indemnización económica vía CREX, pero sin compensación alguna con días libres.   

El pretexto para ello es la situación puntual que está suponiendo desplazar guardias civiles a Cataluña. Sin embargo, los componentes de la Policía Nacional, Cuerpo que se encuentra en las mismas circunstancias, no ha variado ni un ápice, su régimen de turnos en toda España.

Y llueve sobre mojado, pues previamente ya habíamos tenido conocimiento de que se pretendía modificar la jornada laboral del millar de agentes que conforman la plantilla de los Servicios Marítimos de la Guardia Civil, para pasarlos a régimen “especial”, lo que en realidad supone, privar a los mismos, de su derecho al descanso y tiempo libre, pues deberán estar permanentemente, en situación de guardia de localización.

En resumidas cuentas, lo que se constata son los incesantes ataques que la Orden General de prestación de servicio, jornada y horarios está recibiendo por parte del generalato, quienes desde el principio se mostraron reacios a su pleno y efectivo desarrollo, y que han continuado con recortes cuando menos dudosos de cumplir con la legalidad que la propia norma recoge. Desde AUGC rechazamos enérgicamente estas “maniobras”, pues la Dirección General de la Guardia Civil no puede pretender suplir la falta de plantilla, echando sobre las espaldas de los guardias civiles destinados en las unidades operativas, una sobrecarga de trabajo, por culpa de que su ineficacia e irresponsabilidad, les impide buscar otras medidas organizativas. Y no solo es que no estemos de acuerdo con estas “maniobras” sino que lo que desde AUGC estamos impulsando son cambios mayores, como el objetivo irrenunciable, junto a la equiparación salarial, es para nosotros la implantación de turnos de trabajo con cadencias regulares que permitan el efectivo descanso y la necesaria conciliación laboral y familiar; y la adecuada compensación, por medio del complemento de productividad, por realizar la prestación de servicio en horario festivo y nocturno.

La falta de respeto hacia los guardias civiles es clamorosa, porque no tienen ni la más mínima atención para informar a sus asociaciones profesionales, sobre cuestiones como las que estamos señalando, y que tanto afectan a las conciliación familiar y laboral de los integrantes del Cuerpo.

Las órdenes generales de jornada laboral y productividad deberían haber sido revisadas hace ya dos años. Pero como de manera flagrante e irresponsable, no se aborda esta cuestión, nos encontramos ahora que, a los guardias civiles que les amplíen su jornada laboral a 40 horas semanales, percibirán un aumento por exceso de horas, de 120 euros, mientras que los guardias civiles que se encuentran destinados en labores burocráticas y hagan el mismo horario - obviamente con menos peligrosidad y penosidad - cobran 263 euros. Y la solución, por supuesto no pasa por quitar a quienes más complementos reciben, sino por abonar como se merece el esfuerzo y sacrificio realizado por quienes prestan servicios operativos.

En defensa de los guardias civiles, AUGC ya ha recurrido legalmente esta situación inadmisible; y si el Director General de la Guardia Civil, como máximo responsable del Cuerpo, no la remedia inmediatamente, AUGC comenzará a realizar movilizaciones y concentraciones públicas, para que la sociedad comprenda la forma en la que el Gobierno trata a sus guardias civiles.

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