AUGC y el SUP denuncian ante la Inspección de Trabajo las graves carencias en la protección frente al COVID-19

Ambas organizaciones claman el cumplimiento de la normativa en prevención de riesgos laborales y alertan sobre el riesgo grave e inminente al que se ven sometidos decenas de miles de agentes de la Guardia Civil y la Policía Nacional

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Un guardia civil con una mascarilla vigila el tráfico.

AUGC y el Sindicato Unificado de Policía (SUP)  han denunciado ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social las graves carencias en medios de protección individual que padecen Policía Nacional y Guardia Civil y que son necesarios para que los agentes ejerzan las facultades propias que les ha asignado el estado de alarma para evitar el contagio del Covid-19.

La medida, que se ha adoptado al comprobar que no se proporciona a los funcionarios medios profilácticos suficientes como mascarillas, guantes, geles desinfectantes o gafas o que se impide que utilicen aquellos obtenidos por su cuenta, pretende que un organismo oficial acredite esa exposición de alto riesgo, grave e inminente, y que exija a la Administración las medidas para evitar transmisiones del virus.

Esta iniciativa no va a ser la única que adopten ambas organizaciones, puesto que ya se han iniciado los trámites para interponer una demanda en sede judicial, en el ámbito social, exigiendo que se ordene la compra y distribución efectiva y real de equipamientos de protección que eviten que los agentes y sus familias, como colectivo de alto riesgo, estén expuestos a un contagio sin las necesarias medidas profilácticas.

Si no se soluciona esa situación, el SUP y AUGC demandarán de la autoridad judicial que depure las responsabilidades de los mandos que pongan a sus subordinados en riesgo por guardar equipamiento sin utilizarlo o evitar su uso. En la denuncia ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, SUP y AUGC recuerdan que ya hay 9.000 funcionarios de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y Fuerzas Armadas contagiados.

Y que esta cifra es consecuencia directa de una exposición incidental a agentes biológicos contemplada en el Real Decreto 664/1997. En este sentido, recordamos que existe un riesgo grave o inminente generado en el lugar de trabajo, y mientras el trabajador desempeña su actividad laboral, que puede suponer un daño para su salud de difícil o imposible reparación.

Para poner fin inmediato a esta grave situación, plantean en su denuncia que se apliquen pruebas para detectar el Covid-19 a todos los funcionarios de ambos Cuerpos y saber así cuántos de los ahora aislados padecen realmente el virus o están trabajando sin presentar síntomas.

También exigen la entrega inmediata de gafas de protección, mascarillas FPP2 y FPP3, guantes y buzos. Y todo ello en cumplimiento de las obligaciones de la Administración de proteger la salud de los policías nacionales y guardias civiles, y pidiendo que inspectores de trabajo comprueben in situ que la ausencia de protección entre los agentes no es puntual sino generalizada