La precariedad en las instalaciones propicia la agresión de un detenido a un guardia civil en Alicante

La precariedad en las instalaciones propicia la agresión de un detenido a un guardia civil en Alicante

Alicante

Puerta del calabozo en el centro de detención de Pinar de la Horadada.

Desde la Delegación de la Asociación Unificada de Guardias Civiles en la Provincia de Alicante se quiere denunciar una serie de hechos que podían haberse evitado en las instalaciones de uno de sus centros de detención y la falta de prevención de riesgos laborales que padecen los agentes en dichas instalaciones y de los exigen se depuren responsabilidades en la Comandancia de la Guardia Civil en Alicante.

El pasado martes 6 de junio se tuvo conocimiento de la brutal agresión que sufrió uno de los agentes de la Guardia Civil en el interior de los calabozos de Pilar de la Horadada, todo ello a consecuencia de la detención de un ciudadano británico por el supuesto delito de sustracción de un vehículo el cual fue recuperado y entregado posteriormente a su legítimo propietario.

Cabe decir que durante la detención y traslado a las dependencias de la Guardia Civil de dicha localidad, el detenido se encontraba muy agresivo, intentando en todo momento impedir su detención, traslado y finalmente su ingreso en los calabozos del acuartelamiento.

Una vez en el interior del centro de detención, el detenido continuó en una actitud totalmente agresiva, dando fuertes patadas a las puertas y gritando continuamente, hasta que una vez trascurrieron varios minutos el detenido solicitó ir al aseo, por lo que dos agentes entraron en el interior de los calabozos y una vez abrieron la puerta de la celda, el detenido se abalanzó sobre uno de los agentes, agrediéndolo fuertemente, debiendo ser auxiliado por el agente que le acompañaba así como otros que se encontraban en el interior del acuartelamiento realizando otras labores.

Desde AUGC, queremos denunciar que estos hechos podían haberse evitado de haber contado con las instalaciones adecuadas, ya que el centro de detención carece de varias medidas necesarias para la custodia de detenidos, como pueden ser en primer lugar de un sistema de vídeo-vigilancia, así como el pasillo es muy estrecho y los espacios tanto de las celdas como de la dependencia en sí son muy reducidos, convirtiéndose el lugar en una "ratonera" en caso de haber incidencias como la ocurrida, unido a que las puertas de las celdas carecen de barrotes para tener visibilidad con la persona que se encuentra en el interior, así como un pequeño espacio para proceder al engrilletamiento del detenido antes de abrir la puerta, máxime al tratarse de una persona de la que ya se conocía que era muy agresiva.

Por todos estos motivos no se garantizan tanto la seguridad de los agentes, como la integridad física de los detenidos, careciendo de condiciones de higiene y salubridad, ya que tampoco tienen la debida ventilación y se encuentran orientados hacia el sol durante todo el día, provocando que en el interior se alcancen altas temperaturas, más aún en las fechas que nos encontramos donde llegan a soportar temperaturas de más de 40º, todo ello a pesar que recientemente se ha instalado un aparato de aire acondicionado en el pasillo, al interior de las celdas no les entra ventilación ni refrigeración, por el diseño de las puertas.

Cabe destacar que estas y otras deficiencias tanto del centro de detención como de las propias instalaciones del acuartelamiento han sido puestas en conocimiento en más de una ocasión tanto al mando directo de la Unidad como de la propia Comandancia de Alicante y del Consejo de la Guardia Civil, no siendo solventadas hasta la fecha, además de no tratarse de hechos aislados, ya que no es la primera ocasión en la que ocurre algún tipo de incidente.

Desde AUGC queremos en primer lugar, felicitar a los agentes tanto por el servicio realizado logrando la detención de un presunto delincuente, como por seguir soportando tener que trabajar en pésimas condiciones laborales, tanto por la carencia de medios adecuados para desempeñar su labor como de personal, y en segundo lugar mostramos nuestro apoyo al agente agredido, así como ofrecemos nuestros servicios jurídicos para lo que estime oportuno y finalmente solicitamos a la Dirección General de la Guardia Civil que ponga fin a estas circunstancias y a las situaciones que soportan a diario los agentes de la provincia de Alicante en el desempeño de sus funciones debiendo realizarlas con todo tipo de carencias y que cumpla con las normativas vigentes en materia de detenidos y en prevención de riesgos laborales, para que estos hechos no vuelvan a producirse.