El pasado 14 de junio de 2015, esta asociación profesional de Guardias Civiles envió un Fax urgente a la Jefatura de la Comandancia buscando el amparo del Coronel D. Alfonso Rodríguez Castillo ante unos hechos que considerábamos graves y que se estaban produciendo con el nombramiento “a dedo” de agentes para formar parte de la Operación Verano en los días siguientes. El Coronel se vio obligado a tomar una decisión y paralizó en un primer momento los nombramientos arbitrarios que habían realizado tanto el Capitán de la 2ª Compañía en Jerez de la Frontera, como el de la 3ª Compañía en Villamartín.
Al contrario que en el resto del país, donde la convocatoria para participar en el operativo había sido anunciado a todos los interesados, los citados mandos decidieron bajo su propio criterio, quienes iban a formar parte del evento, que, al prestarse fuera de la demarcación de destino del agente, llevaba aparejadas el cobro de indemnizaciones por razón de servicio.
Una vez alertados los mandos anteriores del “error” en su proceder, volvieron a rehacer la selección dando publicidad a la misma y solicitando voluntarios, todo ello en pos de una mayor transparencia, pero como nos temíamos, volvieron a imponer su criterio personal por encima de las normas y reglamentos que establecía con claridad que, por ejemplo, quien ya había disfrutado de una comisión de servicio anteriormente perdía su preferencia para otra.
Esta vez, AUGC optó por acudir a las vía administrativa y recurrir las resoluciones en espera de que la justicia y buen criterio nos diese la razón. No es para menos que ní por parte de los citados mandos territoriales, ni mucho menos, el Jefe de la Comandancia de Cádiz, aceptasen los argumentos de esta Asociación, a la que ya habían declarado la guerra total y sin cuartel castigando cruelmente a representantes y asociados con la única intención de acabar con lo que ellos entienden que puede ser el fin de sus privilegios.
Por fín, el pasado 16 de noviembre, por parte del General Jefe de la Guardia Civil en Andalucía, previo informe de su asesor jurídico, vino a dar la razón a esta asociación, a través de los asociados afectados, declarando expresamente que existió arbitrariedad en el nombramiento de las comisiones de servicio, perjudicando dicha decisión por tanto, a nuestros asociados. El Coronel a su vez, participó de dicha arbitrariedad, desestimando las instancias que iban dirigidas a su persona, declarando ajustadas a derecho los nombramientos efectuados por los Capitanes, y por tanto, ha quedado absolutamente desautorizado por la decisión de su inmediato superior.
A dicha Comisión de servicio, acudieron los “preferidos” de ambos Capitanes, embolsándose por ello en concepto de dietas una cantidad superior a 3200 euros cada uno. En el caso de la 3ª Compañía, fueron enviados a los Puestos de Conil y Chipiona, entre otros, tres Guardias Civiles del Puesto de Villamartín, uno de ellos el que ejerce como conductor del propio Capitán de Compañía, y que además, es una unidad deficitaria en cuando personal, teniendo que cerrar por la tarde y durante la noche debido a la falta de agentes. Por su lado, fueron vetadas todas las solicitudes de los agentes destinados en Arcos de la Frontera, por ser esa la Unidad originaria de la queja ante la flagrante injusticia que se estaba cometiendo.
Ahora queda, resarcir a los afectados por la injusta decisión, desconociéndose en principio cómo puede llevarse ahora a cabo, ahora, que la operación verano ya hace tiempo que terminó. Por parte de esta Asociación se va a solicitar la indemnización que les hubiera podido corresponder en el caso de haber sido seleccionados. Indemnización que en el caso de ser reconocida tendrá que ser abonada por el erario público, y por otro lado, adelantamos que se van a solicitar cuantas acciones punitivas y disciplinarias quepan sobre todos los mandos con responsabilidad en este asunto.