OTRA VEZ SUCEDE EN EL SUBSECTOR DEL HUELVA: un Guardia Civil sufre ansiedad por reprensiones injustificadas por el Jefe del Subsector.

UN GUARDIA CIVIL DE TRAFICO SUFRE UN ATAQUE DE ANSIEDAD TRAS LA REPRENSIÓN INJUSTA DEL JEFE DEL SUBSECTOR DE HUELVA UN GUARDIA CIVIL DE TRAFICO, QUE SE ENCONTRABA DE SERVICIO EN EL INTERIOR DEL SUBSECTOR DE TRAFICO DE HUELVA, TIENE QUE SER ATENDIDO DE URGENCIA POR LOS SERVICIOS PSICOLOGICOS DE LA GUARDIA CIVIL DESPUES DE SUFRIR UN ATAQUE DE ANSIEDAD TRAS SER REPRENDIDO DE FORMA INJUSTA Y VEJATORIA POR EL COMANANTE JEFE INTERINO DEL SUBSECTOR DE HUELVA. Los hechos ocurrieron el pasado día 15 de febrero de 2011, cuando el Guardia Civil se encontraba prestando servicio de seguridad en el interior del Subsector de Tráfico de Huelva. Este Guardia Civil, que estaba en esos momento vigilando las cámaras de seguridad de las instalaciones a la vez que atendía el teléfono, fax y otras cuestiones internas, fue reprendido injustamente de forma vejatoria y delante de sus propios compañeros por el Comandante Jefe Interino del Subsector, porque al parecer, según dicho Jefe, no había pasado el espejo a los bajos de un vehículo particular de otro Guardia Civil de Tráfico que accedió al interior de las instalaciones. Sobre las 14’15 horas del día 15 de febrero, el Guardia Civil que estaba de servicio de seguridad, tras escuchar varios toques de claxon del exterior de las instalaciones, procedió a abrir la puerta de acceso al recinto del Subsector de Tráfico, entrando un vehículo oficial; detrás de éste entró un vehículo particular de un Guardia Civil de Tráfico que venía a realizar gestiones policiales relacionadas sobre un servicio; detrás del vehículo particular del agente accedió también el vehículo del Comandante Jefe Interino del Subsector, que dejó el coche estacionado y acto seguido entró rápidamente en la oficina de seguridad y dirigiéndose al Guardia Civil que realizaba la función de seguridad le profirió de forma altiva y vejatoria las siguiente frase: “que es lo que pasa aquí que se deja la puerta abierta y no se controla a los vehículos que entran, que no se pasa el espejo a los vehículos particulares.” Este Comandante Jefe Interino, aun sabiendo perfectamente que el vehículo particular que había entrado era de un Guardia Civil, reprendió al guardia de seguridad por no mirar las cámaras de seguridad, por no haber pasado el espejo, porque debería haber dejado de atender el teléfono y todo lo que estaba haciendo para comprobar el vehículo que había entrado. El Guardia Civil le responde que el vehículo es de un compañero, incluso el Jefe, reprende al Guardia Civil que ha introducido el vehículo particular en el edificio. Minutos después vuelve el Comandante Jefe Interino a dirigirse al Guardia de Seguridad, volviéndole a insistir que no puede entrar nadie al interior del Subsector de Tráfico y que le de la papeleta de servicio -orden de trabajo- para “providenciarla” y abrir un expediente por haber dejado entrar el vehículo de un compañero. Era la segunda vez que este Jefe “providenciaba” una papeleta de servicio -orden de trabajo- a este Guardia Civil en menos de 15 días, de forma injusta las dos veces y sin querer escuchar las explicaciones que se le ofrecían sobre los hechos, no solo del compañero reprendido, sino de los testigos que se hallaban presentes. A esta reprensión hay que sumar que ese mismo día y momentos antes de que sucediesen estos hechos, este Guardia Civil había sido amenazado por otro mando de su Unidad con perder la productividad mensual de unos 200 euros por supuestamente bajo rendimiento -no poner las denuncias que los mandos consideren adecuado-. El Comandante se limitó a escribir en la papeleta de servicios sin dejar hablar a los presentes sobre los hechos, como normalmente ocurre con este Jefe. Una hora más tarde, uno de los compañeros del Guardia Civil, sorprendido al ver el mal estado anímico en el que se encontraba éste, realiza gestiones para que acuda al Subsector de Tráfico la Teniente psicóloga de la Guardia Civil. La psicóloga le comunica por teléfono que mientras se dirige a lugar le retire el arma a éste compañero y que no se quede solo en ningún momento. La psicóloga, tras personarse en el lugar y hablar con el Guardia Civil ordena que sea evacuado de forma urgente a un centro médico. Una vez que sale del centro médico es tratado esa misma tarde por más de tres horas por la psicóloga en su oficina. No es este el primer caso que se produce en el Subsector de Tráfico de Huelva, hace unos seis meses otro Guardia Civil tuvo que hacer uso de los servicios de psicología de la Guardia Civil también por la actitud y trato hacia sus subordinados de este Comandante, poniendo en conocimiento de la superioridad lo que estaba ocurriendo en el Subsector, sin que hasta la fecha se haya tomado ninguna acción al respecto.- Por parte de AUGC HUELVA se puso hace más de un año en conocimiento de las distintas autoridades Políticas y de la Guardia Civil, mediante la remisión de un dossier, todas las denuncias, arbitrariedades e irregularidades cometidas por el Comandante de Tráfico de Huelva, sin embargo no surtieron efectos ni se tomó ninguna medida. La situación en el Subsector de Tráfico de Huelva ha seguido empeorando desde entonces y creemos que todavía irá a peor porque van a comenzar a retirar el complemento de productividad de al menos tres guardias civiles, que supondrá la merma en su nómina de más de 200 euros. AUGC HUELVA, después de recabar toda la información, pondrá los hechos en conocimiento de las Autoridades internas de la Guardia Civil y de las del Ministerio del Interior, e incluso del Defensor del Pueblo, al considerar que este Comandante no está capacitado para el ejercicio del mando en una Unidad operativa.