Al final otra cuestión de primer orden para un país tildado de democrático como es el terrorismo hacia las mujeres ha tenido que ser resuelto en la ONU.
El CEDAW (Comité de Naciones Unidas para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer), acaba de condenar al Estado español por no actuar de manera diligente en la protección de una víctima de violencia de género y su hija de 7 años, asesinada por su padre. (http://www.elmundo.es/espana/2014/08/04/53df318722601d6a2a8b456b.html)
El dictamen extrae la colección de errores y negligencias que se realizaron y que perjudicaron la protección de ambas y terminaron con la muerte de la pequeña y el calvario de por vida para esa madre.
Nos vamos a quedar con dos cuestiones. Por un lado, la lentitud de una justicia que en temas de VIOGEN debería ser inmediata. Lo que en España supuso 11 años de pleitos, la ONU lo ha resuelto en dos años.
Por otro, la exigencia que el CEDAW hace sobre varias cuestiones como la necesidad de tomar medidas adecuadas y efectivas para que los antecedentes de violencia de género pesen a la hora de establecer los derechos de la custodia. La normativa se debe reforzar para proporcionar una respuesta adecuada en materia de VIOGEN y por último que el personal competente en esta materia RECIBA FORMACIÓN sobre estereotipos de género, entre otras cosas.
En paralelo a la noticia y sin salirnos del contexto de la violencia de género, desde AUGC llevamos años insistiendo a través de un laborioso trabajo de información a sectores como el político, jurídico, al propio Consejo de la Guardia Civil, organismos estatales o asociaciones afectadas de la absoluta necesidad de REGULARIZAR las denominadas UNIDADES DE VIOGEN.
Estas unidades fantasmas se nutren de personal sin formación expresa, sin dedicación exclusiva y sin medios adecuados para dar la protección que las víctimas se merecen.
Estos hechos fueron expuestos el pasado mayo, a través del grupo parlamentario del PSOE en una Proposición No de Ley sobre la que el PP se limitó a confundir entre las unidades de VIOGEN y las EMUMES.
Quizá acabemos antes si acudimos a órganos como la ONU, a través del CEDAW, al objeto de ponerles en conocimiento las carencias que a nivel policial existen en el tratamiento de la violencia de género.
El CEDAW (Comité de Naciones Unidas para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer), acaba de condenar al Estado español por no actuar de manera diligente en la protección de una víctima de violencia de género y su hija de 7 años, asesinada por su padre. (http://www.elmundo.es/espana/2014/08/04/53df318722601d6a2a8b456b.html)
El dictamen extrae la colección de errores y negligencias que se realizaron y que perjudicaron la protección de ambas y terminaron con la muerte de la pequeña y el calvario de por vida para esa madre.
Nos vamos a quedar con dos cuestiones. Por un lado, la lentitud de una justicia que en temas de VIOGEN debería ser inmediata. Lo que en España supuso 11 años de pleitos, la ONU lo ha resuelto en dos años.
Por otro, la exigencia que el CEDAW hace sobre varias cuestiones como la necesidad de tomar medidas adecuadas y efectivas para que los antecedentes de violencia de género pesen a la hora de establecer los derechos de la custodia. La normativa se debe reforzar para proporcionar una respuesta adecuada en materia de VIOGEN y por último que el personal competente en esta materia RECIBA FORMACIÓN sobre estereotipos de género, entre otras cosas.
En paralelo a la noticia y sin salirnos del contexto de la violencia de género, desde AUGC llevamos años insistiendo a través de un laborioso trabajo de información a sectores como el político, jurídico, al propio Consejo de la Guardia Civil, organismos estatales o asociaciones afectadas de la absoluta necesidad de REGULARIZAR las denominadas UNIDADES DE VIOGEN.
Estas unidades fantasmas se nutren de personal sin formación expresa, sin dedicación exclusiva y sin medios adecuados para dar la protección que las víctimas se merecen.
Estos hechos fueron expuestos el pasado mayo, a través del grupo parlamentario del PSOE en una Proposición No de Ley sobre la que el PP se limitó a confundir entre las unidades de VIOGEN y las EMUMES.
Quizá acabemos antes si acudimos a órganos como la ONU, a través del CEDAW, al objeto de ponerles en conocimiento las carencias que a nivel policial existen en el tratamiento de la violencia de género.
