Las asociaciones profesionales de la Guardia Civil, contra la regulación del aspecto físico de los agentes

Pese a que podemos entender la facultad que desde la Dirección General se tiene para regular ciertas cuestiones sobre el aspecto físico de los agentes, lo que no entendemos es que se pretenda hacerse con cánones estéticos más propios de principios del siglo XX que de nuestros tiempos.

El borrador de la Orden General pretende regular distintas cuestiones del aspecto de los guardias civiles, como la extensión del bigote o los tatuajes.

Las asociaciones profesionales representativas del Instituto armado con presencia en el Consejo de la Guardia Civil, Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) y Unión de Guardias Civiles
(UniónGC), hemos remitido un escrito conjunto a la Dirección General de la Guardia Civil informando de nuestro rechazo más absoluto al proyecto de Orden General que pretende regular el aspecto físico de los miembros del Cuerpo.

Y es que, desde las asociaciones firmantes, pese a que podemos entender la facultad que desde la Dirección General se tiene para regular ciertas cuestiones sobre el aspecto físico de los agentes, lo que no entendemos es que se pretenda hacerse con cánones estéticos más propios de principios del siglo XX que de nuestros tiempos.

Además, consideramos que, en términos jurídicos, con dicho borrador de Orden General la Dirección General de la Guardia Civil está entrando a regular derechos y libertades, como la libertad de expresión, la protección de datos de carácter personal o el principio de igualdad, así como entrando incluso a regular la vida privada de los guardias civiles al pretender que dicha norma se haga extensible fuera del ámbito del servicio profesional, sin tener capacidad jurídica para ello.

Entendemos por tanto que la Dirección General de la Guardia Civil pretende regular, con éste proyecto, aspectos legales fuera de su ámbito de competencia, y con una herramienta jurídica, la Orden General, inapropiada ya que sería por medio de una Ley Orgánica la única manera que tiene la Administración de limitar derechos, y por supuesto ésta capacidad correspondería solo al Poder Legislativo o al Gobierno de la Nación.

Por ello, desde las asociaciones profesionales de la Guardia Civil nos oponemos al proyecto normativo que la Dirección General de la Guardia Civil nos presenta, y pedimos a la Administración que la retire tal y como está redactada., reservándonos posibles acciones futuras en caso de que la norma viese la luz en los términos en que actualmente está redactada.

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