La Asociación Unificada de Guardias Civiles de Badajoz, se lamenta que la democracia no entre en los Cuarteles. Una vez más y como viene siendo habitual en esta Comandancia, los guardias civiles de Badajoz observan cómo se burlan sus derechos, y éstos quedan al antojo de lo que disponga el Jefe al mando de la Comandancia. Por eso desde AUGC queremos recordar a este Oficial Jefe que la Ley está para cumplirla y que la misma es igual para todos y todas. Y la Guardia Civil, que es la primera en hacerla cumplir, también debe ser la primera en acatar lo que dictaminen las autoridades judiciales y no entorpecer ni retrasar a las mismas.
Porque esto es lo que, precisamente, está haciendo el Tte. Coronel Gazapo que se niega a acatar la Sentencia nº 1223/2013 del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura en la que se establece que “…declaramos, procediendo que se facilite a la mencionada Asociación un local adecuado en las dependencias oficiales de la Guardia Civil en Badajoz, sita en Calle Santo Domingo de Guzmán sin número, para que ejerza sus actividades profesionales”.
Este incumplimiento de la sentencia es un claro intento de burlar la justicia y no cabe argumentar que se carece de espacio para dicho local. Ya que, como afirma el juez, su ubicación bien podría ser la sala de oficiales. Claro que ya se ha dado prisa el Tte. Coronel para cambiar el nombre de dicha dependencia por la de “Sala de recepción de autoridades”. De esta manera deja a AUGC y a los guardias civiles sin local y él se queda con su “chiringuito” en el que celebrar actos ajenos a la Institución. Como así ocurrió el pasado 26 de Marzo, mientras AUGC Badajoz celebraba su XVI Asamblea provincial en la Escuela de Tráfico de Mérida, esta “sala de autoridades” se usaba como espacio para una merendola de mujeres de oficiales de la Comandancia de Badajoz. Uso y disfrute también para que algún oficial pueda ver, en la intimidad, partidos de futbol de pago y utilizando de “porteros” a los funcionarios del control de entrada para que le avisen cuando llega el repartidor de pizza, o para poder desayunar los mandos alejados del resto del personal, cuando estos para calentar su comida han tenido que comprarse un microondas. Esta actitud a nuestro juicio deja claro que ni la justicia ni el decoro van con el Jefe de dicha Comandancia. Máxime, cuando ya tenía conocimiento del desafortunado y condenable acto celebrado por el Tte. Coronel Tejero en Valdemoro. Con el agravante, en este caso, de destinar esta sala a la celebración de un ágape cuando en la Comandancia cuenta con unas instalaciones propias para este tipo de eventos, como es la cafetería.
Según Jesús Jiménez (Secretario General Federal de AUGC Extremadura), seguimos asistiendo al uso de las dos varas de medir en esta Institución, mientras a los cargos asociativos de AUGC se les sigue persiguiendo y sancionando por poner en conocimiento de la opinión pública hechos como estos, otros pueden hacer de unas instalaciones públicas sus cortijos particulares con la certeza de que su conducta no será merecedora de sanción. En pleno siglo XXI algunos mandos de la Guardia Civil siguen olvidando que la Constitución Española entró en vigor el 6 de Diciembre de 1978 y que una dependencia policial, no es lo mismo que un cortijo.
