El pasado 4 de febrero, el secretario general de AUGC, Alberto Moya, presentaba un escrito de queja tanto al Director General, Arsenio Fernández de Mesa, como al ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel García-Margallo, lamentando la exclusión del conjunto de los guardias civiles que trabajan en la zona del Estrecho de Gibraltar a la hora de las condecoraciones y los reconocimientos por su labor.
Esta queja se producía con motivo de la imposición de tres medallas a otros tantos oficiales de la Guardia Civil, para agradecer así el reconocimiento que el Ministerio de Asuntos Exteriores pretendía realizar sobre el Cuerpo. Un reconocimiento en el que no existía alusión alguna al trabajo de los guardias civiles que desarrollan su labor sobre el terreno.
Gracias a esta denuncia de AUGC se despertó el interés del Subdelegado del Gobierno de Cádiz, que se comprometió a abordar el asunto. Así, el pasado 2 de marzo se recibió respuesta desde el Ministerio del Interior a la carta de Alberto Moya (puedes ver las cartas del Ministerio y la de Alberto Moya en archivo adjunto)
En dicha respuesta se explica que la concesión de las condecoraciones de la Orden del Mérito Civil son “competencia exclusiva del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación”, “habiéndose elevado las propuestas correspondientes a los casos citados por Autoridades ajenas a la Dirección General del Cuerpo”.
Sin embargo, en su escrito, el Ministerio del Interior informa de que “con ocasión de los motivos argumentados por usted (se refiere a Alberto Moya), no sólo se han seguido a instancias del Director General, con anterioridad, diversos procedimientos de concesión de recompensas, sino que, en la actualidad, se han impulsado varios expedientes para condecorar a miembros del Cuerpo”.
De este modo, comprobamos una vez más que ha tenido que ser necesaria una denuncia de AUGC para defender los derechos de los guardias civiles. Lamentamos, en este sentido, que por parte de los máximos responsables de los ministerios y de la Dirección General de la Guardia Civil se siga incurriendo en el vicio de recompensar siempre a los altos mandos, ignorando el trabajo duro y sacrificado que deben llevar a cabo los guardias civiles que hacer su labor fuera de los cómodos despachos donde se sientan los que lucen esas medallas que se obtienen en las calles, los montes o, en este caso, las aguas del Estrecho de Gibraltar.
Mientras ésta siga siendo la línea de reconocimiento y recompensas en la Guardia Civil, AUGC seguirá denunciando todos aquellos casos que premien a los que no arriesgan nada mientras que dejan en el olvido a los que ponen en riesgo sus vidas al servicio de las leyes y de los ciudadanos.
