AUGC lleva un año advirtiendo de este sinsentido que está planificando la Jefatura de Unidades Especiales y de Reserva de la GC (JUER).
Ya en el Pleno del Consejo de marzo de 2014 escuchamos los primeros rumores y se le preguntó directamente a la DAO, quien confirmó que no tenía conocimiento de ello.
El pasado 3 de noviembre la Secretaría de Especialidades de AUGC mantuvo una reunión con la DAO, quien ya no decía desconocer una propuesta de la JUER para la reestructuración del TEDAX, sino que argumentaba que todavía no tenía la aprobación de Estado Mayor, además de recordarnos que las cuestiones de organización de unidades están fuera de las funciones de los vocales del Consejo de la Guardia Civil.
Pero AUGC sabía perfectamente de lo que estaba hablando, y sabíamos que este rumor anunciaba un camino sin retorno. Además, diferimos en cuanto a que una situación como la que tratamos no sea una cuestión que ataña a los vocales del Consejo de la Guardia Civil, en tanto que afecta de pleno a la carrera profesional, a las retribuciones, a los destinos y a la conciliación familiar, cuestiones todas ellas tratadas y debatidas constantemente en el Consejo.
Hace un mes y medio que ya apareció en las unidades de los TEDAX lo que tan sibilinamente nos habían negado una y otra vez: la reestructuración de los equipos de desactivación, consistente en la supresión de 15 GEDEX y de casi 100 TEDAX.
No nos explicamos cuál es la base sobre la que ha nacido este estudio de la JUER que avala la supresión de unidades tan emblemáticas, necesarias y consolidadas.
Desde AUGC levantamos la voz de alarma ante la supresión de estos GEDEX cuando nos encontramos en un contexto de alarma ante el terrorismo mundial yihadista. Por hacer un símil, es como si ante una epidemia sanitaria el Gobierno decidiera cerrar hospitales.
Estas son las incongruencias de una Dirección General que avala ideas como ésta, en este caso de la JUER, y que además pretende hacernos comulgar con ruedas de molino, pues lo necesario no es suprimir equipos, sino ampliar las insuficientes plantillas de todos los equipos, problema que por otra parte tienen numerosas especialidades en la Guardia Civil
Tampoco hay que olvidar la situación en la que quedan estos profesionales y sus familias, aunque no es difícil adivinar, siendo lo “normal” que desde la Dirección General de la Guardia Civil se les ofrezcan recoger sus enseres y dejar su lugar de residencia (donde han podido estar 5, 10, 20 o 30 años) en un breve tiempo… Sin mirar atrás.
AUGC se ha volcado en este último mes en demostrar lo innecesario y absurdo de esta restructuración presentando informes realizados por los propios TEDAX, donde queda argumentado este despropósito y el retroceso en seguridad que incidirá directamente sobre la ciudadanía.
Además, debemos visibilizar esta situación de desamparo en seguridad y prevención ante lo que era la capacidad de reacción inmediata que hasta ahora consolidaban estos especialistas en desactivación, tanto para la ciudadanía como para las instalaciones propias de la Guardia Civil. Por todo ello estamos desarrollando una serie de reuniones con las Delegaciones de Gobierno para poner sobre la mesa la opinión de los profesionales del TEDAX a los que hasta ahora nadie de la DGGC ha preguntado.
También es cuando menos curioso que la Policía Nacional no esté inmersa en esta cuestión ni se hayan planteado reducir efectivos en sus TEDAX, desde luego con un criterio más realista y acertado ante la amenaza que supone el terrorismo islámico, que sin duda irá aumentando en un futuro no muy lejano.
O también pudiera ser que es una cuestión de presupuesto y de nuevo la Guardia Civil debe sufrir el recorte. Un ejemplo de ello es que mientras las plantillas de los equipos de desactivación del CNP suelen ser de ocho especialistas, los de la Guardia Civil son de de cinco y a veces de menos especialistas.
Desde AUGC seguimos insistiendo en lo desacertada de esta decisión que se quiere llevar a cabo sin contar con realidades tan claras como un nuevo terrorismo cada día más amenazante y para el que debemos estar si cabe más presentes que antes. Seguiremos trasladando éste y otros argumentos de peso a los grupos parlamentarios y a la sociedad con el objetivo de paralizar esta merma de seguridad que atiende a razones que todavía desconocemos, pero que desde luego chocan con la realidad de seguridad del Estado.
Ya en el Pleno del Consejo de marzo de 2014 escuchamos los primeros rumores y se le preguntó directamente a la DAO, quien confirmó que no tenía conocimiento de ello.
El pasado 3 de noviembre la Secretaría de Especialidades de AUGC mantuvo una reunión con la DAO, quien ya no decía desconocer una propuesta de la JUER para la reestructuración del TEDAX, sino que argumentaba que todavía no tenía la aprobación de Estado Mayor, además de recordarnos que las cuestiones de organización de unidades están fuera de las funciones de los vocales del Consejo de la Guardia Civil.
Pero AUGC sabía perfectamente de lo que estaba hablando, y sabíamos que este rumor anunciaba un camino sin retorno. Además, diferimos en cuanto a que una situación como la que tratamos no sea una cuestión que ataña a los vocales del Consejo de la Guardia Civil, en tanto que afecta de pleno a la carrera profesional, a las retribuciones, a los destinos y a la conciliación familiar, cuestiones todas ellas tratadas y debatidas constantemente en el Consejo.
Hace un mes y medio que ya apareció en las unidades de los TEDAX lo que tan sibilinamente nos habían negado una y otra vez: la reestructuración de los equipos de desactivación, consistente en la supresión de 15 GEDEX y de casi 100 TEDAX.
No nos explicamos cuál es la base sobre la que ha nacido este estudio de la JUER que avala la supresión de unidades tan emblemáticas, necesarias y consolidadas.
Desde AUGC levantamos la voz de alarma ante la supresión de estos GEDEX cuando nos encontramos en un contexto de alarma ante el terrorismo mundial yihadista. Por hacer un símil, es como si ante una epidemia sanitaria el Gobierno decidiera cerrar hospitales.
Estas son las incongruencias de una Dirección General que avala ideas como ésta, en este caso de la JUER, y que además pretende hacernos comulgar con ruedas de molino, pues lo necesario no es suprimir equipos, sino ampliar las insuficientes plantillas de todos los equipos, problema que por otra parte tienen numerosas especialidades en la Guardia Civil
Tampoco hay que olvidar la situación en la que quedan estos profesionales y sus familias, aunque no es difícil adivinar, siendo lo “normal” que desde la Dirección General de la Guardia Civil se les ofrezcan recoger sus enseres y dejar su lugar de residencia (donde han podido estar 5, 10, 20 o 30 años) en un breve tiempo… Sin mirar atrás.
AUGC se ha volcado en este último mes en demostrar lo innecesario y absurdo de esta restructuración presentando informes realizados por los propios TEDAX, donde queda argumentado este despropósito y el retroceso en seguridad que incidirá directamente sobre la ciudadanía.
Además, debemos visibilizar esta situación de desamparo en seguridad y prevención ante lo que era la capacidad de reacción inmediata que hasta ahora consolidaban estos especialistas en desactivación, tanto para la ciudadanía como para las instalaciones propias de la Guardia Civil. Por todo ello estamos desarrollando una serie de reuniones con las Delegaciones de Gobierno para poner sobre la mesa la opinión de los profesionales del TEDAX a los que hasta ahora nadie de la DGGC ha preguntado.
También es cuando menos curioso que la Policía Nacional no esté inmersa en esta cuestión ni se hayan planteado reducir efectivos en sus TEDAX, desde luego con un criterio más realista y acertado ante la amenaza que supone el terrorismo islámico, que sin duda irá aumentando en un futuro no muy lejano.
O también pudiera ser que es una cuestión de presupuesto y de nuevo la Guardia Civil debe sufrir el recorte. Un ejemplo de ello es que mientras las plantillas de los equipos de desactivación del CNP suelen ser de ocho especialistas, los de la Guardia Civil son de de cinco y a veces de menos especialistas.
Desde AUGC seguimos insistiendo en lo desacertada de esta decisión que se quiere llevar a cabo sin contar con realidades tan claras como un nuevo terrorismo cada día más amenazante y para el que debemos estar si cabe más presentes que antes. Seguiremos trasladando éste y otros argumentos de peso a los grupos parlamentarios y a la sociedad con el objetivo de paralizar esta merma de seguridad que atiende a razones que todavía desconocemos, pero que desde luego chocan con la realidad de seguridad del Estado.
