En los últimos días se ha viralizado un vídeo en redes sociales en el que un cazador falta reiteradamente al respeto y amenaza a unos guardias civiles que le solicitaban su identificación y el permiso necesario para llevar a cabo su actividad.
Al margen del deplorable comportamiento de este ciudadano y la escasa educación que muestra en su actitud, lo que las imágenes vienen a corroborar es el cada vez menor respeto a la autoridad que AUGC viene denunciando desde hace años.
Una denuncia que ayer el portavoz nacional de AUGC, Pedro Carmona, reiteraba en directo en el programa 'Todo es mentira', de Cuatro.
Un cazador insulta y amenaza a la Guardia Civil por pedirle los papeles
— Todo Es Mentira (@todoesmentiratv) January 13, 2022
Pedro Carmona: "no entendemos por qué sale ahora este vídeo que es de hace 15 meses. Parece que quieren manchar nuestra actuación, que fue ejemplar"#TodoEsMentira13Ehttps://t.co/paDefSmNmk pic.twitter.com/0lN2RG5whc
?Condenamos rotundamente la actitud del cazador al arremeter verbalmente contra los compañeros que le han dado el alto simplemente para comprobar la licencia de caza.
— AUGC Guardia Civil (@AUGC_Comunica) January 12, 2022
Seguimos denunciando que cada vez es más difícil mantener el principio de autoridad.https://t.co/EWfDz4FYOe
Y es que el continuo aumento de agresiones, tanto físicas como verbales, a guardias civiles año tras año demuestra la necesidad de una medida que nuestra organización ha reclamado reiteradamente: el endurecimiento de las sanciones y penas derivadas de estos comportamientos.
Éste es precisamente uno de los puntos clave que figura en el planteamiento que AUGC le hará mañana al ministro del Interior en la entrevista que mantendrá con representantes de nuestra organización.
En este sentido, en la última Comisión de Riesgos Laborales del Consejo de la Guardia Civil, celebrada el pasado mes de noviembre, se presentó el informe de siniestralidad correspondiente al pasado año. De los datos incluidos en este informe cabe destacar que más del 40% de los accidentes que sufren los guardias civiles son consecuencia de agresiones físicas
De este modo, cada semana, los guardias civiles se convierten en el blanco de los delincuentes, que saben lo barato que les sale agredir a un trabajador de la seguridad pública.
Unas agresiones que son cada vez más frecuentes en zonas azotadas por el narcotráfico, como las provincias de Cádiz y Málaga, o en territorios fronterizos, como Ceuta y Melilla, pero que se extienden también por el resto de España.
Por eso AUGC lleva pidiendo de manera reiterada a lo largo de los últimos años que se refuerce la protección judicial tanto a los guardias civiles como a sus familiares ante las amenazas y agresiones que sufren.
Estas agresiones suponen un gran daño para los guardias civiles y sus familiares. No sólo desde el punto de vista físico, sino también psicológico.
